Las almendras, siempre las nombran cuando una persona tiene bajo el hierro o tiene anemia, pero ¿sabías que también tiene Vitamina E, grasas saludables, proteínas, calcio, e incluso gracias a su contenido en flavonoides se utiliza como antiinflamatorio en suplemento para tratamientos naturales? La verdad es que en general todos los frutos secos son buenos, pero en especial las almendras le dan un toque a nuestras albóndigas de carne casares que te encantarán!
No dudes en probar también mi receta de Albóndigas de merluza, seguro que también te encantan.
Ve a la cocina y prepáralas.
- Tiempo de elaboración: 40min
- Raciones: 5
Ingredientes
500 g de carne picada sin grasa
30 g de almendra molida
1 zanahoria grande
1 cebolla mediana
Un poco de perejil
2 diente de ajo picado o 1 cucharadita de ajo en polvo
Una pizca de sal
1 cucharadita de comino molido y otra de pimentón dulce
Pimienta molida al gusto
Elaboración
Precalienta el horno a 180ºC con calor arriba y abajo.
En un cuenco grande incorpora la carne. Pica la verdura muy finamente, si tienes una trituradora o procesador de alimentos mejor para que quede bien fina y agrégala al cuenco con la carne, añade la almendra molida y las especias.
Amasa con las manos, hasta que queden todos los ingredientes bien integrados.
Prepara la bandeja del horno con papel para hornear, haz las albóndigas de carne en bolitas con las manos y colocalas en la bandeja.
Hornea 15 minutos a 180ºC.
Nota:
Puedes tomarlas con una salsa de tomate.
500g de tomate natural triturado
Una pizca de sal y pimienta
3 diente de ajo picado
Orégano
Unas gotitas de aceite de oliva
Pon un cazo al fuego y agrega una cucharadita de aceite de oliva. Seguidamente pon el ajo picado, y dar unas vueltas a fuego de bajo a medio para que no se os queme. Agrega el tomate, el orégano y remueve. Dejar hervir unos 5 min, salpimienta e incorpora las albondigas a fuego bajo, cuando remuevas hazlo con cuidado que se te pueden romper las albondigas. Cocinar unos 5 min más. Listo!








Pingback: Albóndigas de merluza - Consujugo
Pingback: Diferentes tipos de harina - Consujugo